Despido objetivo

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En los últimos tiempos, los despidos objetivos han cobrado una gran importancia en el mundo laboral. Muchos empleadores los usan como una forma de liberarse de empleados cuyos trabajos ya no son necesarios o no cumplen con los estándares establecidos. Es importante entender los requisitos legales y los derechos de los empleados que se ven afectados por esta medida. En este artículo examinaremos las leyes y regulaciones relacionadas con los despidos objetivos y sus consecuencias para los trabajadores.
El despido objetivo es una modalidad de despido que se produce por causa de la empresa, sin que se pueda atribuir mal comportamiento al trabajador. No se puede considerar una sanción disciplinaria, sino una decisión empresarial, generalmente motivada por una crisis económica o una reducción de la plantilla.

Es una forma de despido que respeta los derechos laborales del trabajador, ya que se debe abonar la indemnización por despido prevista en la ley, que suele ser de 20 días por año trabajado. Además, si la empresa no cumple con estas obligaciones, el trabajador podrá reclamar la indemnización legal correspondiente.

Por otro lado, el despido objetivo también es conocido como despido colectivo o despido por causas económicas, ya que se produce cuando la empresa está en una situación económica inestable y necesita reducir la plantilla. En este caso, los trabajadores no tienen culpa de la situación y se les debe abonar la indemnización legal.

¿Cuál es la indemnización por despido objetivo?

La indemnización por despido objetivo es una cantidad de dinero que se le paga al trabajador cuando su empleo es finalizado por motivos objetivos. Esta indemnización se establece de acuerdo con la legislación laboral y se calcula en función de los años de servicio y el salario percibido por el trabajador.

En España, la indemnización por despido objetivo se calcula según la Ley de Seguridad Social, que establece que la indemnización se calculará como una cantidad fija por año de servicio, con un máximo de 12 mensualidades. Esta indemnización se incrementará en un 20% si el trabajador ha cumplido 5 años de servicio y un 40% si ha cumplido 12 años de servicio.

En otros países, la indemnización por despido objetivo se calcula de manera diferente. Por ejemplo, en Estados Unidos la indemnización se calcula de acuerdo con el salario y el tiempo de servicio, pero el monto máximo no está establecido por ley y se puede establecer por contrato colectivo.

En cualquier caso, la indemnización por despido objetivo se paga al trabajador al momento de su despido para compensar la pérdida de empleo, y para ayudarle a cubrir los gastos ocasionados por el cambio de empleo.

¿Cómo se justifica un despido objetivo?

Un despido objetivo es una decisión empresarial tomada con el fin de reducir costos, reorganizar la empresa o prepararla para una nueva etapa de su desarrollo. Se trata de una forma de despedir a los empleados de manera justa y basada en criterios objetivos.

En España, el despido objetivo se justifica a partir de la Ley de Seguridad Social, que establece que el despido debe de estar justificado por situaciones como la reducción de los costes, la reorganización de la empresa, la falta de rentabilidad, la aplicación de nuevas tecnologías, la necesidad de modernizar la empresa o el cierre de la misma.

Por lo tanto, para que un despido objetivo sea justificado, la empresa debe demostrar que existen causas objetivas y justificadas para tomar esta decisión. Estas causas deben estar relacionadas con el negocio de la empresa y no pueden ser motivadas por la discriminación o el acoso laboral.

Además, la empresa debe demostrar que ha intentado tomar otras medidas para reducir costes, como la reducción de salarios o la jornada laboral antes de optar por el despido objetivo.

Por último, la empresa debe comunicar el despido a los trabajadores afectados de manera clara y concisa, explicando los motivos de la decisión y ofreciendo una indemnización justa.

¿Cuándo es improcedente un despido objetivo?

Un despido objetivo es un despido del empleado sin causa justificada. Esto significa que el empleado ha sido despedido sin una explicación específica o motivo. La ley generalmente establece que un empleador no puede despedir a un empleado sin causa justificada.

Un despido objetivo es improcedente cuando se produce sin previo aviso, sin justificación razonable o sin ofrecer alguna indemnización. Otra situación en la que un despido objetivo es improcedente es cuando se produce por motivos discriminatorios, como la raza, el género, la religión, la edad o la discapacidad.

Los empleadores también deben asegurarse de que los empleados sean tratados de forma justa cuando se produzca un despido objetivo. Esto significa que los empleados deben ser informados de la decisión y recibir una explicación detallada sobre por qué se les está despidiendo. También deben ser informados de sus derechos y recibir alguna forma de indemnización.

Un despido objetivo también es improcedente si la empresa no ha seguido los procedimientos adecuados. Esto significa que los empleados deben ser informados de la decisión con suficiente anticipación para que puedan buscar otra ocupación y tener la oportunidad de alegar su caso antes de que se lleve a cabo el despido.

En general, cualquier despido objetivo que no cumpla con estas reglas y procedimientos establecidos por la ley es improcedente. Si un empleado cree que ha sido despedido de forma improcedente, puede presentar una demanda por despido injusto.

En conclusión, los despidos objetivos pueden ser una herramienta útil para ajustar la plantilla de una empresa a sus necesidades actuales. Sin embargo, resulta vital que los empleadores se aseguren de cumplir con los requisitos legales y procedimientos al evaluar los despidos objetivos, para asegurarse de que el derecho de los trabajadores a un trato justo y equitativo se mantenga intacto.
El despido objetivo es una forma de despido que se produce cuando un trabajador es despedido sin justa causa. Esto significa que el trabajador no ha cometido ninguna falta laboral que justifique su despido, sino que se produce como una medida de ajuste de la plantilla laboral. El despido objetivo es una forma de despido sin indemnización para el trabajador, aunque se le pueden reconocer derechos como el cobro de una indemnización por antigüedad o una indemnización por finiquito. El despido objetivo se diferencia del despido disciplinario, ya que en este último se produce cuando un trabajador es despedido por una falta laboral cometida.

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Publicado por:

Elvira Moreno Beltrán

Posee una Licenciatura en Administración y gestión de empresas realizada en el Centro Universitario Cardenal Cisneros. Es especialista en facturación y fiscalidad tributaria en España.

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